Dice el amigo: “Las mujeres no se fijan en mi porque no tengo
dinero” o “Cuando tenga dinero la invitaré, antes no”
Me pregunté por qué los hombres dicen que las mujeres son
interesadas. ¿Serán todas? Me dije. En cierta medida todos tenemos
algún interés. ¿No? Entonces llega a mí el ejemplo perfecto de mujer, una
compañera de la Universidad que conocí hace poco y una situación con una de
estas señoritas que me contó un amigo.
Dicen que tenemos categorizados a los hombres, y nos dicen que
no deberíamos…Nos dicen que por qué lo hacemos. Algunos nos
critican, nos han dicho bobas e infantiles. Pero, cada uno de nosotros cabe
dentro de un tipo de persona, tenemos un perfil. Pertenecemos a un grupo de
gente, con gestos, gustos y modismos definidos, algunos se prometen tener pensamientos
iguales, claro los más aficionados. Algunos estamos definidos por generaciones,
y obvio al mismo tiempo no somos todos iguales. Entender la
complejidad del mundo es difícil para algunos y por eso critican. Al final, así
funciona todo y como todo, también existe un tipo de mujer. Claro! Esa
que se lo quiere marranear, no solo a usted sino a cuanto man le caiga que
tenga plata.
Por lo general son mujeres que saben llamar la atención, son las
típicas sufridas y las más confianzudas que usted conozca, siempre le van a dar
indicios de que para ellas usted es un hombre agradable, que puede con un poco
más de esfuerzo llegar a tener algo con ella y claro, depende de sí usted
señor, es un huevón y tiene dinero pero no el suficiente. Entonces ellas
lo van a tener de amigo toda la vida y seguramente usted estará detrás de eso,
y nunca lo va a concretar. Por ende usted gastará tiempo y obvio dinero
tratando de hacerla feliz pero siempre será un amigo más. Recuérdelo! Siempre
el amigo.
Por otro lado si usted tiene buen dinero, un buen puesto, y casa
y carro. Mejor ni hable, ella no necesitará más que una promesa de amor eterno
y será suya y quizás hasta se cambie de religión solo por su gran estatus de
vida. Hablará de lo bueno que es usted en la cama y no hará sino halagarlo, yo
creo que hasta podría hostigarlo de tanta melcochería.
También puede suceder que usted se crea el patito feo de su
universidad y de repente compre moto... No se vaya a sorprender de la cantidad
de viejas que pueden estar interesadas en usted. Eso sí, aclaro, no les sucede
a todos, si usted es un gil por naturaleza ni la moto más bonita le ayudará en
su búsqueda de sexo. Solo un poco de actitud de gran hombre y tendrá a unas
cuantas mostrándole vídeos de cómo se masturban. O en el peor de los casos
estarán rifándolo entre las niñas del grupo al cual usted ha dejado impactado
con su nueva adquisición.
Algo si es cierto muchachos y es que debemos aceptar que si un
hombre trabaja y tiene un estatus social aceptable (según las reglas de la
sociedad), él se convierte en un buen partido. Pero en realidad no todo depende
de eso, o por lo menos para algunas lo más importante es realmente lo que usted
puede hacer o no con lo mucho o lo poco que tenga. Debemos aceptarlo, somos
todos capitalistas y aunque como yo muchos crean en el amor, este ya está
envenenado con ciertas cosas que no se pueden evitar, (evitarlas es pertenecer más
a el capitalismo que no queremos seguir. En todo caso vivimos en la matrix.)
O dígame alguna oriamiga si no le parece lindo que la inviten a cenar, o
que le compren algún detalle por más simple que sea. (Conclusión de Suci). Yo
podría sacar otra conclusión y es que aunque con dinero no hay amor de amor no
se vive. Lo que genera el atractivo muchas veces es el sentido de
responsabilidad que tenga el hombre con el que de pronto se vaya a salir.
Bueno, exceptuando a aquellas "princesas" de las que
trata este post. Tenga cuidado con ellas, son de las que fingen amor solo por
el dinero o se acuestan con sus jefes por un ascenso y dicen ser fieles a
morir.
Entonces es muy diferente una mujer normal que es auto
suficiente y no necesita a un hombre que tenga plata para salir y otra que sale
con un hombre solo porque de alguna manera él muestra tener algún
tipo de estatus económico. Como dicen por ahí de todo se encuentra en la
viña del señor.
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